Mito No. 5:
Después de la cirugía, quedará una cicatriz desagradable en el lugar de la incisión porque no “respira” debajo del sostén posquirúrgico y no puede sanar
Realidad: La apariencia de la cicatriz depende principalmente de la habilidad del cirujano y luego también de su cuidado hacia la cicatriz cuando la herida cicatriza. Ya sea que la cicatriz esté en la areola, en el pliegue debajo del pecho o en la axila, el sujetador de compresión LIPOELASTIC® ha sido diseñado para no obstaculizar el proceso de cicatrización y para no ejercer demasiada presión innecesaria sobre el área dolorida. El material del que está hecho el sujetador para la primera fase del cuidado posquirúrgico está equipado con la tecnología Classic Dry. Es transpirable y permite que la piel respire durante todo el tiempo de uso. Además, el material del sujetador PI unique para la segunda fase del cuidado posquirúrgico está equipado con la tecnología Active Dry, que es lo más suave posible para la piel y garantiza una sensación de frescor duradera. Si aún sientes que las cicatrices deberían desaparecer más rápido después de la cirugía, te recomendamos la cinta adhesiva de silicona Epi-Derm de la empresa BIODERMIS®. El gel encapsula completamente el tejido cicatrizado, reduciendo el riesgo de aparición de cicatrices queloides antiestéticas.